Comentarios a la Guerra de las Galias, Julio César

Buenos días,

Hoy nos volvemos a salir de la temática habitual de la Segunda Guerra Mundial que caracteriza este blog para adentrarnos en la época romana. Concretamente en algunos hechos que acontecieron durante la última época republicana y cuyo protagonista es uno de los más grandes generales, políticos y estrategas militares que ha dado la humanidad. Me estoy refiriendo a Cayo Julio César, y el libro que quiero presentar es "Comentarios a la Guerra de las Galias".

César nació en el año 100 AC en el seno de una familia patricia de escasa relevancia en la Roma tardorrepublicana, pese a estar emparentado con Cayo Mario, uno de los hombres más influyentes de su época. Desde pequeño, tuvo claro cual debía ser su camino, y durante toda su vida, lo fue trabajando para llegar dónde llegó. Hábil político, avezado militar, genial estratega, Julio César sin duda ha sido uno de los personajes más interesantes de todos los tiempos.

Cuenta la leyenda, que una vez se indignó con unos piratas cilicios que le habían capturado, ya que osaron pedir un rescate por su vida que el consideraba insuficiente. Ni que decir tiene, que una vez liberado, César no paró hasta perseguir a dichos piratas y acabar con su vida.

En cuanto al libro que nos atañe, César narra la conocida como "Guerra de las Galias", en la que los romanos, bajo su mando, conquistan a los pueblos galos, que habitaban más o menos en lo que hoy son los territorios de Francia y Bélgica. La campaña fue dura, ya que los galos eran luchadores aguerridos. Sin embargo tenían una debilidad que César explotó de forma magistral, que era su falta de unión. Formaban parte de tribus que durante muchos siglos habían luchado entre sí y que no fue hasta tarde que entendieron que la única forma de vencer a un ejército tan disciplinado como el romano, era estando unidos. Dicha unión se consiguió bajo el mando de uno de los jefes de una de las tribus, Vercingetorix, y en algunas batallas, los galos infligieron derrotas a los romanos (por ejemplo la conocida batalla de Gergovia), pero finalmente, y tras la batalla de Alesia, los galos se rindieron a los romanos.

Una de las curiosidades del libro es que César narra la historia en tercera persona, pero teniéndolo a él como protagonista. Un estilo narrativo cuanto menos diferente. La obra la vemos ahora como un documento fundamental para comprender el devenir de esos acontecimientos, pero en aquella época se escribió como un documento propagandístico, ensalzando las virtudes del gran general. Exagerándolas a veces, pero no por ello su lectura deja de ser más que interesante.

Un saludo,

Javier