La operación carne picada, fue sin duda una de las operaciones de espionaje más arriesgadas de toda la guerra, llevada a cabo por el servicio secreto británico. Se concibió y elaboró en el Reino Unido, pero su escenario principal fue España, en concreto la provincia de Huelva.
Os pongo en antecedentes. A principios de 1943, la Segunda Guerra Mundial en Europa estaba estancada. Los ejércitos del Eje habían perdido el norte de África, pero tenían una posición sólida en la la Europa continental, aunque en el frente ruso, estaban sufriendo algunos (bastantes) reveses (Stalingrado, Antony Beevor). Los Aliados, para continuar presionando, necesitaban abrir un segundo frente, y para ello tenían varias alternativas. Finalmente, la opción elegida fue invadir el sur de Europa atacando Sicilia.
Sin embargo, querían a toda costa, no sólo mantener en secreto sus planes, si no intentar engañar al enemigo, obligándoles a concentrar fuerzas en algún lugar lejos del frente real. Para ello, idearon la operación carne picada.
En este libro, "El hombre que nunca existió, de Ben Macintyre", el autor, gracias al acceso a documentos hasta ahora confidenciales y desconocidos, narra con todo lujo de detalles, el dispositivo que se montó en torno a esta operación de espionaje durante la Segunda Guerra Mundial. Desde la concepción de la idea, la búsqueda de un cadaver adecuado, la reconstrucción de una historia, hasta el "desembarco" del personaje principal en una playa de Huelva.
En esta trama, no sólo estaban involucrados los países en lucha. También es fundamental en la misma el papel que juegan las autoridades españolas, que, indirectamente y gracias a su amistad con los alemanes, propician que el engaño tenga éxito.
Os recomiendo la lectura de este libro para entender mejor el desarrollo de una operación de espionaje, magistralmente ejecutada y cuyo éxito ayudó sin duda a cambiar el curso de la guerra.
Un saludo,
Javier
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